Llegó una alegría, por demás necesaria. Almirante jugó por momentos muy bien, fue efectivo en el arco de de enfrente y tuvo a un Rodrigo Díaz brillante, marcando tres tantos. Fue una tarde extraña, con dos expulsados, pero al fin y al cabo con victoria.
Hubo un cambio de actitud notorio. Barbas metió mano en el equipo y la inclusión de Salazar fue clave, ganando muchas pelotas en el ataque. Sin embargo, el partido se abrió a los pocos minutos de iniciar el encuentro con un tiro libre formidable del Rengo que no pudo sacar Del Riego.
Pocos minutos después llegaría el empate de San Carlos, de la mano de Barboza pero pasó poco tiempo para que Rodrigo Díaz marcara con otra genialidad el segundo tanto. Al Rengo le salió todo y el equipo jugó a la par del número diez.
Ya en la segunda etapa llegaría el tanto de Victor Meza, empujando entre centrales tras un centro rasante y Sommariva volvería a descontar. El 3-2 de San Carlos hizo que el visitante se acomode en el terreno de juego y con ventaja tras la expulsión de García por doble amarilla. Sufrimiento innecesario.
Sin embargo, de la mano del Rengo llegaría nuevamente la tranquilidad. Tras un claro penal a Victor Meza, el diez cambió el tiro por gol y marcó el tercero en la tarde para asegurarle la victoria al Aurinegro. Sobre el final, tras la expulsión de Machuca, Díaz tuvo la chance de marcar uno más desde la mitad de la cancha y se fue apenas arriba. Si entraba, era para cerrar el estadio.
Almirante Brown ganó y dejando una buena imagen. Ahora arranca una nueva rueda y habrá que barajar y dar de nuevo, con otro entrenador en el banco de suplentes.
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